lunes, 31 de diciembre de 2012

Oración para recibir el año nuevo


Señor, Dios, dueño del tiempo y de la eternidad, tuyo es el hoy y el mañana, el pasado y el futuro. Al terminar un año quiero darte gracias por todo aquello que recibí de TI.
Gracias por la vida y el amor, por las flores, el aire y el sol, por la alegría y el dolor, por cuanto fue posible y por lo que no pudo ser.

Te ofrezco cuanto hice el año pasado, el trabajo que pude realizar y las cosas que pasaron por mis manos y lo que con ellas pude construir.
Te presento a las personas que a lo largo de estos meses amé, las amistades nuevas, los más cercanos a mí y los que estén más lejos, los que me dieron su mano y aquellos a los que pude ayudar, con los que compartí la vida, el trabajo, el dolor y la alegría.
Pero también, Señor hoy quiero pedirte perdón, perdón por el tiempo perdido, por el dinero mal gastado, por la palabra inútil y el amor desperdiciado.
Perdón por las obras vacías y por el trabajo mal hecho, y perdón por vivir sin entusiasmo.
También por la oración que poco a poco fui aplazando y que hasta ahora vengo a presentarte. Por todos mis olvidos, descuidos y silencios nuevamente te pido perdón.
Al iniciar un nuevo año detengo mi vida ante el nuevo calendario aún sin estrenar y te presento estos días que sólo TÚ sabes si llegaré a vivirlos.
Hoy te pido para mí y los míos la paz y la alegría, la fuerza y la prudencia, la claridad y la sabiduría.
Quiero vivir cada día con optimismo y bondad llevando a todas partes un corazón lleno de comprensión y paz.
Cierra mis oídos a toda falsedad y mis labios a palabras mentirosas, egoístas, mordaces o hirientes.
Abre en cambio mi ser a todo lo que es bueno que mi espíritu se llene sólo de bendiciones y las derrame a mi paso.
Cólmame de bondad y de alegría para que, cuantos conviven conmigo o se acerquen a mí encuentren en mi vida un poquito de TI.
Danos un año feliz y enséñanos a repartir felicidad.

domingo, 30 de diciembre de 2012

Una familia diferente


Entre los católicos se defiende casi instintivamente el valor de la familia, pero no siempre nos detenemos a reflexionar el contenido concreto de un proyecto familiar, entendido y vivido desde el Evangelio. ¿Cómo sería una familia inspirada en Jesús? La familia, según él, tiene su origen en el misterio del Creador que atrae a la mujer y al varón a ser "una sola carne", compartiendo su vida en una entrega mutua, animada por un amor libre y gratuito. Esto es lo primero y decisivo. Esta experiencia amorosa de los padres puede engendrar una familia sana.

Siguiendo la llamada profunda de su amor, los padres se convierten en fuente de vida nueva. Es su tarea más apasionante. La que puede dar una hondura y un horizonte nuevo a su amor. La que puede consolidar para siempre su obra creadora en el mundo.

Los hijos son un regalo y una responsabilidad. Un reto difícil y una satisfacción incomparable. La actuación de Jesús, defendiendo siempre a los pequeños y abrazando y bendiciendo a los niños, sugiere la actitud básica: cuidar la vida frágil de quienes comienzan su andadura por este mundo. Nadie les podrá ofrecer nada mejor.

Una familia cristiana trata de vivir una experiencia original en medio de la sociedad actual, indiferente y agnóstica: construir su hogar desde Jesús. "Donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos". Es Jesús quien alienta, sostiene y orienta la vida sana de la familia.

El hogar se convierte entonces en un espacio privilegiado para vivir las experiencias más básicas de la fe cristiana: la confianza en un Dios Bueno, amigo del ser humano; la atracción por el estilo de vida de Jesús; el descubrimiento del proyecto de Dios, de construir un mundo más digno, justo y amable para todos. La lectura del Evangelio en familia es, para todo esto, una experiencia decisiva.

En un hogar donde se le vive a Jesús con fe sencilla, pero con pasión grande, crece una familia siempre acogedora, sensible al sufrimiento de los más necesitados, donde se aprende a compartir y a comprometerse por un mundo más humano. Una familia que no se encierra solo en sus intereses sino que vive abierta a la familia humana.

Muchos padres viven hoy desbordados por diferentes problemas, y demasiado solos para enfrentarse a su tarea. ¿No podrían recibir una ayuda más concreta y eficaz desde las comunidades cristianas? A muchos padres creyentes les haría mucho bien encontrarse, compartir sus inquietudes y apoyarse mutuamente. No es evangélico exigirles tareas heroicas y desentendernos luego de sus luchas y desvelos.

José Antonio Pagola

sábado, 29 de diciembre de 2012

Toca mirar hacia delante


Toca mirar hacia delante. Al comenzar un año, al reincorporarse a las clases, al volver al ritmo cotidiano de los días. Tiene algo de monótono (vuelta a la rutina), y al tiempo algo de novedoso (¿qué me deparará este año?). Tiene algo de cómodo (ya se sabe lo que toca), pero también algo de inquietante (¿todo estará bien?).

El comienzo del año es una ocasión privilegiada para respirar hondo, tragar saliva y empezar a caminar con cierta energía, tomando las riendas del año antes de verme inmerso en las prisas. Y eso, con los pies muy en el suelo, y la mirada al frente.

CON LOS PIES EN EL SUELO
Mi suelo está hecho de mi presente más habitual: nombres, horarios, rutinas, trabajo, problemas, obligaciones, ocio… Mi suelo está hecho de relaciones personales, algunas muy buenas, otras más difíciles. Está hecho de lo que me gusta hacer y lo que, aunque me disgusta, también me toca. 
Está hecho de las calles en las que me muevo, las gentes con las que comparto espacios, los libros pendientes, las horas libres y las saturadas, la tele que veo para pasar el rato… Mi suelo es este espacio en el que transcurre mi vida. Y en mi suelo también está Dios

Dedico un breve rato a recorrer los nombres que se intuyen en mi vida este año, y a pedirle a Dios que nos bendiga a todos (de los amigos, de mis compañas, de la familia, de otros círculos…) Hago una oración por todos ellos.

Y LA VISTA ALZADA
Pero no basta con sumergirme en lo cotidiano y lo habitual. Necesito también un horizonte, unos planes, algo hacia lo que hay que caminar. 
Un horizonte que me lanza hacia el futuro, y está constituido por proyectos, planes, propósitos… Lo que me gustaría que ocurriera en este año 2013, lo que quiero que sea mi vida, y la de otros, lo que me gusta imaginar de aquí a junio, o incluso a junio del 2020 si me da por darle a la cabeza. 
Necesito pararme y saber qué es lo que más deseo, qué es lo que quiero. Este nuevo año puedo “dejar que pase” o puede ser el mejor de mi vida si aspiro cada día a ser feliz, a contentar a los otros, a escuchar, a superarme ... puedo pasar por el 2013 mirando tristemente y con monotonía al suelo o  mirar al frente, un poquito más allá de mi suelo, y encontrar a Dios, que tiene planes y sueños para mi en este nuevo año.

jueves, 27 de diciembre de 2012

El amor nace

El amor nace de un corazón, que como el de los pastores, vive asombrándose.
Vivir asombrándose es entender que todo hecho guarda una buena noticia.
Es renovar los aumentos, cuando en las cosas pequeñas se va perdiendo la vista.
Es ponderar con cuidado, el minucioso trabajo de Dios, como un Artista.
Es preguntarse por qué, de lo más insignificante se ocupa Aquél que está arriba.
Vivir asombrándose es ponerse con paciencia a distinguir el entramado de la vida.
Es agradecer el tesoro que guarda nuestra arcilla.
Vivir asombrándose es comprender que del todo, se sabe una partecita.
Es descubrir que el árbol se guardaba ya en la semilla, y en la gracia a pedir, lo que Dios nos ofrecía.
Vivir asombrándose es comprender que en las cosas de Dios, no existen las naderías.
¿En qué será que tengo que renovar mi asombro para que no se pase de largo el Señor con su visita?

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Quiero ser tu pino Señor


Esta Navidad quiero ser tu pino Señor. Un pino sencillo de los que nacen en las sierras, pero con unas ramas verdes y frescas, alimentado por la sabia de tu vida divina.

Como un reflejo tuyo, mi forma será triangular, signo de la Santísima Trinidad y si una rama sobresale demasiado, hazme sensible para cortarla antes de que me deforme demasiado.

Empezaré a limpiar mi tronco y mis ramas, de todo musgo o heno que tenga.
Y así poco a poco quitaré todo lo que me estorba; mi egoismo, mis envidias, mis incomprensiones, mi orgullo, mi soberbia, que como "plaga" crecen sin que yo me de cuenta.

Como un recuerdo de todas las estrellas que brillaron esa noche bendita en que Tú naciste, me llenaré de foquitos de colores para reflejar a los demás la alegría de Tú venida al mundo.

Escogeré unas esferas doradas, las más brillantes para que representen todas mis Alabanzas, por el sol que sale cada día, por las estrellas, por los atardeceres tan hermosos, y por todas las maravillas del mundo que Tú creaste para nosotros, por ser nuestro Ser Supremo.

Continuaré con muchas esferas rojas, que representan mis Peticiones. Te pido que hagas de mi un instrumento de Tú Amor. Te pido por mi familia, mis amigos, mi comunidad, mi parroquia. Por mi Patria para que sea un país donde Tú siempre reines. Que jamás el desaliento, entre en mi corazón. Te pido Tú Santo Espíritu y con él, la verdadera Sabiduría que viene de tí.

Dame Señor lo que Tú sabes que me conviene y yo no sé pedir. Dame mucha paciencia y humildad. Dame prudencia para nunca herir a nadie y dame caridad para tener un corazón grande que sepa amar.

Pondré también unas esferas azules, para pedirte con ellas Perdón porque yo no siempre he sido fiel, porque no he sabido dar ni perdonar, porque viendo "la luz" he preferido "la oscuridad", porque conociendo "el bien" he optado por "el mal".

Por último me llenaré de esferas plateadas, muy grandes que serán para darte Gracias, por todo lo que he recibido de Tí. Gracias porque me has otorgado salud, bienestar, alegría y satisfacciones.

Gracias también por la enfermedad, las penas y los sufrimientos, aunque me cuesta trabajo decírtelo y aceptar tu voluntad. Tú sabes lo que hiciste.

Gracias Señor por todo aquello que me acercó íntimamente a Tí. Es tanto lo que tengo que agradecerte.

Y en la punta, con una luz muy intensa, pondré una estrella enorme, que me ilumine siempre, esa será mi Fe. Una Fe madura e inquebrantable, siempre en aumento, que se alimentará de tu Sagrada Eucaristía y de tu palabra.

Por eso esa luz brillará para todo aquel que se acerque a mi, porque Tú brillas en mi.

Yo quiero ser esta y todas las próximas Navidades, tu pino Señor.

Lléname de alegría para participar a todos mis hermanos el gozo de poseerte Señor.

lunes, 24 de diciembre de 2012

Vivir la Navidad en cristiano


                                                                                   Belén (s. XV) de la Catedral de León

Para los cristianos la Navidad es un tiempo muy especial. No es simplemente un recuerdo, ni un mero símbolo; ni menos aún una especie de cuento o de juego para gente menuda. Ni simplemente un modo de que los adultos puedan sentirse niños de nuevo, al menos por unos días. 


Un Bing Bang redentor

      La Navidad es un tiempo litúrgico en el que renovamos la conciencia de un acontecimiento que sigue teniendo plena vigencia: la segunda Persona de la Trinidad, la Palabra de Dios, ha nacido en un pesebre de Belén. Dios se ha hecho hombre, se ha hecho Niño, entrando así en la historia humana y su lógica. Por tanto, según unas coordenadas concretas: en un momento dado, en un lugar determinado, a través de una cultura que Él quiso asumir con todas las consecuencias. A partir de entonces, no se ha retirado ni se ha retractado de ese acontecimiento definitivo, que ha cambiado la vida del mundo y sigue, como un “Bing Bang” redentor, expandiendo su energía salvadora en el tiempo y en el espacio de cada uno y de todos, a la vez que pide nuestra colaboración para que su amor llegue hasta los confines del universo. 

     Dios sigue viviendo como hombre en Jesús resucitado. Esa Humanidad Santísima está en el seno de la Trinidad. El vencedor de la Cruz sigue intercediendo por nosotros ante Dios Padre. Sigue presente, también, en esta tierra especialmente en la Iglesia y en su misión, actuando por medio del Espíritu Santo en los corazones y en las culturas que le acogen. Sigue naciendo cada vez que alguien se abre al Amor con mayúsculas (el de Dios) o al amor hacia los demás, que es, según San Juan, camino y manifestación, al menos incipiente y siempre necesario, del amor a Dios. 

     La Navidad sólo sucedió históricamente “de una vez por todas”. Pero, al ser Dios su protagonista principal, no es algo que simplemente pasó; sino que sigue siendo plenamente actual. No sólo en el “Hoy” eterno de Dios, sino también en nuestras vidas, que se abren mediante la fe a la vida de Dios, permitiéndonos vivir y comprender los valores eternos, mientras tratamos de reproducirlos en nuestra existencia ordinaria. Lo hacemos, ciertamente, en la medida de nuestras modestas posibilidades; pero a la vez, y esto es lo fascinante, estamos llamados a realizarlo con la vida misma de Dios (el cristiano pertenece al Cuerpo místico de Cristo); con su fuerza redentora y salvadora, siempre amable; con su luz reveladora y maravillosa. 

     La Navidad celebra este nacimiento y esta vida de Dios entre los hombres y de los hombres con Dios. Un nacimiento y una vida que, según la fe cristiana, tienen una referencia al pasado, y, a la vez, son plenamente actuales y condición para la vida plena en el futuro de los hombres. 


¿Cómo vivir la Navidad en cristiano? 

     De todo ello cabe deducir cómo se puede hoy “vivir la Navidad en cristiano”. 

     Quizá, apurados por la crisis económica, no podamos contemplar tantas luces en las calles y en los comercios; pero eso nos puede descubrir que la luz que más espera el Niño es la de nuestra vida. 

     Puede que hayan disminuido los símbolos cristianos de ese acontecimiento, el nacimiento de Dios en el tiempo, que celebramos; pero es el cristiano el que debe ser, en su propio ambiente, signo vivo de Cristo. 

     Tal vez los “Nacimientos” o los “Belenes” serán en algunos lugares más discretos o menos vistosos; pero los que se ponen (con sus figuritas ingenuas, el musgo y las casas de corcho) seguirán representando el Amor, y la respuesta que espera de cada uno, como realidad que llena de sentido la historia. 

     Quizá se reduzca la calidad y variedad de una ideal “mesa navideña”; en todo caso el altar sobre el que se pone pan y vino significa el corazón de los cristianos, que elevan hacia Dios la ofrenda de su existencia cotidiana en acción de gracias por hacernos participar de su vida, unidos al corazón de Cristo. Y es que Belén y el Calvario son inseparables. 

     Incluso aunque volviéramos a “tiempos mejores” en el espejismo de un engañoso espíritu navideño, nuestro vivir la Navidad no sería auténtico si no existiera una preocupación “real” por acercarnos de nuevo o más intensamente a Dios, a través de la oración y de los sacramentos (especialmente la Confesión y la Eucaristía) y de las obras del amor. Es decir, con un desvelo “real” por los que están a nuestro lado en la familia, en el trabajo y en la calle; especialmente por los que no tienen hogar o compañía, o carecen de ropa o de comida, o por los que están enfermos, en estos días. 

     Así Dios ha de nacer de nuevo en el corazón de cada cristiano, como condición para que pueda nacer en otros corazones. Pero hay que dejarle nacer en la mirada y en los hechos. Así la Navidad permitirá dejar que se hagan realidad los sueños


Navidad en y desde la familia 

     La Navidad es la fiesta de la alegría porque es la fiesta de la fe que se hace vida. Sobre la base de la Encarnación de Dios, la Navidad es igualmente la fiesta de la familia y de la amistad. Por eso decía Guardini: “Todo regalo debe ser en el fondo un símbolo del único gran regalo, en que Dios entregó a su Hijo por la salvación del mundo (1 Jn 4, 9s)”. 

     Dentro de la familia, vivir la Navidad en cristiano significa, por ejemplo, el “volcarse” de unos con otros en costumbres que vale la pena mantener o recuperar: el belén, el árbol, los villancicos; alguna comida más especial, conversaciones y paseos familiares, atención particular a los más pequeños, a los ancianos y a los enfermos; gestos concretos de desprendimiento personal, por parte de todos los miembros de la familia, a favor de quienes, ahí afuera, no tienen nada o casi nada. Eso para empezar, pero aún hay más. 

     Imaginaba Guardini que María le habría contado a San Juan acerca de su anhelo por esperar al Mesías, muchos años atrás. Para ella esa venida era muy diferente de la liberación terrena y glorificación humana que esperaban muchos. “Quizá en ella había también un presentimiento, que no habría podido explicar ella misma; una sensación de que la misteriosa figura del que ‘había de venir’ la afectaba muy personalmente a ella...” 

     Esto sucede de alguna manera con cada cristiano. La venida de Jesús y la Navidad nos afecta siempre de manera irrepetible, porque “cristiano” quiere decir continuador, como signo e instrumento, de la misión de Cristo, ungido por su Espíritu. Y por eso, la Navidad es a la vez la fiesta de la fe que se comunica, también en y por las familias (los padres y madres son los primeros apóstoles de sus hijos). 

     De ahí la importancia, en estos días, de cuidar las oraciones especialmente de los niños, bendecir la comida al menos en las fiestas, participar en la Misa, que es siempre el centro de la fiesta cristiana, manifestar la vida cristiana en el amor al prójimo. Y todo ello desde el seno de esta familia de Dios (la Iglesia), que nace con Jesús. 

     “Esta nueva familia de Dios comienza en el momento en el que María envuelve en pañales al ‘primogénito’ y lo acuesta en el pesebre. Pidámosle: Señor Jesús, tú que has querido nacer como el primero de muchos hermanos, danos la verdadera fraternidad. Ayúdanos para que nos parezcamos a ti. Ayúdanos a reconocer tu rostro en el otro que me necesita, en los que sufren o están desamparados, en todos los hombres, y a vivir junto a ti como hermanos y hermanas, para convertirnos en una familia, tu familia” (Benedicto XVI, Homilía en la Misa de Nochebuena, 25-XII-2010).





(publicado en www.religionconfidencial.com, 19-XII-2011)

domingo, 23 de diciembre de 2012

San Nicolás viene de España


Sinterklaas (San Nicolás) es la palabra mágica por excelencia para los niños holandeses. El santo patrón de Rusia, Grecia y Turquía, entre otros muchos territorios, es también el que se encarga de repartir regalos en los hogares de los Países Bajos. La festividad que se conmemora hoy está escrita en letras de oro en los calendarios neerlandeses porque San Nicolás desempeña allí un papel equivalente al de los Reyes Magos entre nosotros. Eso significa que miles de chavales y no tan chavales habrán saltado esta mañana de sus camas propulsados por el motor de la ilusión para revisar el contenido de sus zapatos y ver si sus sueños se han hecho realidad.
La Navidad, como se ve, llega temprano a los Países Bajos. La tradición manda que el santo desembarque el primer sábado después de la celebración de San Martín (11 de noviembre). Este año llegó el pasado día 17 al puerto de Roermond, en el sur de Holanda, y desde entonces ha recorrido buena parte del país. La llegada es todo un acontecimiento que congrega a decenas de miles de entusiastas seguidores, sobre todo niños, y que es retransmitido en directo por todas las televisiones. Este año fueron más de 50.000 los que se acercaron a Roermond a presenciar en vivo la comitiva fluvial.
A diferencia de Santa Claus, que es el reflejo de San Nicolás dibujado por los descendientes de los neerlandeses que emigraron al otro lado del Atlántico, el santo que se venera en los Países Bajos no viaja en un trineo guiado por renos sino en un barco de vapor. Otra cosa que les distingue es que su cuartel general no está en el Polo Norte sino en España, que es a donde regresa cuando la tarea de distribuir regalos toca a su fin. Sobre ese último extremo pueden encontrarse explicaciones para todos los gustos. Cabe apelar a la herencia de los ochenta años de dominación hispana (1568 a 1648) aunque el recuerdo que ha quedado de aquella época de sangre y guerras no cuadra mucho con el espíritu navideño. En algunos lugares aún pervive la siniestra amenaza -«que viene el Duque de Alba»- a la que recurrían muchas madres holandesas para mantener a raya a sus hijos. Otra de las advertencias era la de que si no se portaban bien San Nicolás se los llevaría con él a España.
Hay quien piensa que el vínculo entre San Nicolás y España se forjó cuando Bari, la ciudad italiana en la que reposan los restos del santo, formaba parte del Reino de Nápoles y pertenecía por tanto a la Corona hispana.
Ya dejó escrito Julio Caro Baroja que el mito «no busca la causa de la cosa en sí» sino que se limita a ser «un relato que satisface al que lo crea y a gran parte de los que lo oyen», así que mejor no dar más vueltas sobre el origen de la leyenda de San Nicolás. Vale la pena mencionar que los predicadores calvinistas intentaron eliminar la festividad del calendario por sus obvias concomitancias con la religión de los invasores pero tuvieron que darse por vencidos al comprobar el profundo arraigo que tenía entre la población.
Como los niños españoles, los holandeses escriben cartas detallando su lista de preferencias y las envían por correo a San Nicolás o se las entregan en propia mano en alguno de los muchos desfiles que protagoniza. Al igual que los Reyes, el santo tiene una comitiva formada por varios sirvientes. Antes de la II Guerra Mundial solo había un paje, Pedrito el Negro (Zwarte Piet en neerlandés). Sin embargo, tras la contienda San Nicolás se acostumbró a un séquito mayor gracias al poco apego a la tradición de los soldados canadienses que liberaron al país de los nazis. Fueron ellos los que organizaron los primeros desfiles durante la posguerra y los que decidieron que la comitiva resultaría más vistosa si el solitario Zwarte Piet multiplicaba su presencia.
Los pajes, todos teñidos de negro, se encargan de repartir unos dulces muy característicos -pepernoten- que hacen las veces de los caramelos en los desfiles de los Magos. En algunas zonas de Bélgica, donde se mantiene también la tradición, el propio San Nicolás reparte naranjas y mandarinas como recordatorio del lugar donde tiene fijada su residencia. Según la tradición, el santo volverá a embarcar hoy hacia España. Le esperan días de mucho ajetreo.

jueves, 20 de diciembre de 2012

ENCUENTRO DE NAVIDAD




El pasado sábado. 15 de Enero, a las ocho de la tarde,  nos reuníamos en los salones de las Religiosas de MM. Inmaculada, alrededor de un centenar de Equipistas, con niños y Consiliarios para celebrar el tradicional Encuentro de Navidad de este Sector.
Esta vez el encargado de su preparación y realización fue el Equipo 21, con la colaboración del Equipo del Sector. Y la verdad es que los matrimonios del Equipo 21, con todos sus numerosas retoños, lo tenían muy trabajado y muy bien preparado.


Se inició el Encuentro con la Eucaristía presidida por su Consiliario Donato y concelebrada con el Consiliario del Equipo del Sector Dionisio. Previamente Inma nos hacía una preciosa introducción a la misma hablándonos de  este tiempo de preparación a la Navidad. Tras ello, Cristina, también del Equipo 21, nos relató un no menos precioso cuento de Navidad que iba de estrellas como no podía ser menos.
Iniciamos la Eucaristía, con la participación de todo el equipo y sus numerosos hijos de cortas edades que dieron lo mejor de si mismo, con canciones y lecturas.
D. Donato nos regaló una muy bella y sentida homilía en la que se puso de manifiesto el verdadero sentido de estos momentos, de la espera del nacimiento de Jesús y de Juan el Bautista precursor del mismo, para lo que también contó con  la participación de los mas pequeños que, con sus respuestas a las preguntas que les formulaba, nos ayudaron a a acercarnos a Jesús y al espíritu de la verdadera Navidad. 
En el tiempo de las ofrendas los niños volvieron a participar ofreciendo panderetas, balones y el Pan y el Vino.

No se quedaron las ofrendas solo en ello, hubo también ofrendas muy personales, pues en ese momento dos nuevos matrimonios se incorporaron al Movimiento: Jesús y Sandra y Francisco y Desiré, rodeados por todo su Equipo 19,  asumían solemnemente su compromiso de pertenencia las Equipos de Nuestra Señora  en un ambiente de emoción y alegría de todo el Sector de Palencia  entre los nutridos aplausos de todos los asistentes.
Finalizada la Eucaristía el Equipo 21 nos deleitó con la representación de una escena navideña en la que los actores fundamentales fueron los niños muy bien arropados por sus padres. Una delicia.
Para acabar el Equipo de Sector ofreció unos típicos dulces navideños, regados con cavas, sidras y bebidas infantiles que fueron compartidos por todos en el ambiente de cariño, cordialidad y cercanía que caracteriza el carisma ENS, y que sirvió para que todos pudiéramos compartir los buenos deseos de paz y felicidad para estas fiestas navideñas y para el próximo año.
Gracias a todos por la masiva asistencia a este Encuentro y enhorabuena a los dos nuevos matrimonios que ya forman parte de este Sector y al Equipo 21 por todo su entusiasmo y trabajo en la preparación del Encuentro.

martes, 18 de diciembre de 2012

Quién es quién en Adviento


Busco el silencio

No podemos encontrar a Dios en medio del ruido, la agitación.

Fijémonos en la naturaleza: los árboles, las flores, la hierba de los campos, crecen en silencio; las estrellas, la luna, el sol, se mueven en silencio. Lo esencial no es lo que podamos decir a Dios, sino lo que Él nos dice, y lo que dice a los otros a través nuestro.

En el silencio Él nos escucha; en el silencio, habla a nuestras almas.

En el silencio nos concede el privilegio de oír su voz:

Silencio de nuestros ojos.
Silencio de nuestros oídos.
Silencio de nuestras bocas.
Silencio de nuestros espíritus.

En el silencio del corazón, Dios hablará.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Desde el Corazón ... estamos vigilantes

VIGILA y cuida los dones que Dios te ha dado. No es bueno dejar que muera o no sirva para nada, lo mejor que existe en nosotros.

VIGILA tu vida interior. ¿Por qué tanto empeño en la eficacia, en lo que se ve y, tan poco, en el equilibrio de uno mismo?

VIGILA tu vida exterior. No te dejes llevar por las sensaciones. Llena, todo lo que haces y eres, con contenido y verdad.

VIGILA aquello que te produce vértigo o temor. No dejes que, nada ni nadie, perturbe tu derecho a estar y a vivir en paz.

VIGILA las tareas que tienes encomendadas. Dales un cierto sabor cristiano. ¿Que no te atreves? ¿Que es difícil? Dios también lo tuvo complicado para hacerse presente en medio de los hombres

VIGILA tu reloj. No vivas sin sentido. Que no pasen las horas sin un pensamiento para Dios por lo mucho que ama y se acerca hasta la humanidad.

VIGILA tu fe. No es lo mismo ser bueno que ser creyente. No es suficiente ser bueno y dejar de lado a Dios. ¿Dónde está la fuente y la cumbre del bien si no es en Dios?

VIGILA tu compromiso con la Iglesia. Si nos alejamos del calor, podemos coger un resfriado. Si nos alejamos de la Iglesia, podemos contaminarnos con una poderosa neumonía espiritual.

VIGILA tu caridad. Sal al encuentro de algo o de alguien. Prepara el camino al Señor en tu casa, con tu familia, con tus amigos.

VIGILA tu testimonio. ¡Habla de Dios! Comienza a pensar en dónde y cómo instalar el belén, la estrella, un signo cristiano.
Javier Leoz

¿Cual es tu Navidad?



Aqui os dejo un video por si os sirve en la preparación del Adviento. En una sociedad consumista, egoista, poderoza y engreida... Jesús nacerá y se hará presente... aunque el vino niño, pobre, debil, necesitado.... Te invito a preguntarte: ¿Cual es mi Navidad?

domingo, 16 de diciembre de 2012

EL EVANGELIO DE HOY





"Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos” 
 Jn 3, 10-18:
En aquel tiempo, la gente preguntaba a Juan: «¿Entonces, qué hacemos?» El contestó: «El que tenga dos túnicas, que se las reparta con el que no tiene; y el que tenga comida, haga lo mismo».
Vinieron también a bautizarse unos publicanos y le preguntaron: «Maestro, ¿qué hacemos nosotros?» El les contestó: «No exijáis más de lo establecido».
Unos militares le preguntaron: «¿Qué hacemos nosotros?» El les contestó: «No hagáis extorsión ni os aprovechéis de nadie, sino contentaos con la paga».
El pueblo estaba en expectación, y todos se preguntaban si no sería Juan el Mesías; él tomó la palabra y dijo a todos: «Yo os bautizo con agua; pero viene el que puede más que yo, y no merezco desatarle la correa de sus sandalias. El os bautizará con Espíritu Santo y fuego; tiene en la mano el bieldo para aventar su parva y reunir su trigo en el granero y quemar la paja en una hoguera que no se apaga». Añadiendo otras muchas cosas, exhortaba al pueblo y le anunciaba la Buena Noticia.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

De ti depende, de ti dependo



Es, básicamente, lo que viene a decir la letra de esta canción. Las imágenes que se muestran acompañan y nos relatan que los pequeños gestos de amor desinteresado hacia los demás van generando una onda positiva en la que otros entran. Y es que el amor se contagia.  El mensaje es muy sencillo porque nos dice lo que podemos hacer, lo que pasa es que no nos sale de forma natural ese amor desinteresado. Pero nosotros tenemos el modelo de Jesús y podemos optar por él.

domingo, 9 de diciembre de 2012

El Evangelio de hoy


Evangelio: Lucas 3, 1-6
"Todos verán la salvación de Dios"

En el año quince del reinado del emperador Tiberio, siendo Poncio Pilato gobernador de Judea, y Herodes virrey de Galilea, y su hermano Felipe virrey de Iturea y Traconítide, y Lisanio virrey de Abilene, bajo el sumo sacerdocio de Anás y Caifás, vino la palabra de Dios sobre Juan, hijo de Zacarías, en el desierto. 
Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de conversión para perdón de los pecados, como está escrito en el libro de los oráculos del profeta Isaías: "Una voz grita en el desierto: Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos; elévense los valles, desciendan los montes y colinas; que lo torcido se enderece, lo escabroso se iguale. Y todos verán la salvación de Dios".

sábado, 8 de diciembre de 2012

Inmaculada María

María, Madre del sí,
tu ejemplo me admira.
Me admira porque arriesgaste tu vida;
me admira porque no miraste a tus intereses
sino a los del resto del mundo;
me admira y me das ejemplo de entrega a Dios.

Yo quisiera, Madre, tomar tu ejemplo,
y entregarme a la voluntad de Dios como tú.
Yo quisiera, Madre, seguir tus pasos,
y a través de ellos acercarme a tu Hijo.

Yo quisiera, Madre, tener tu generosidad y entrega
para no decir nunca «no» a Dios.
Yo quisiera, Madre tener tu amor
para ser siempre fiel a tu Hijo.

Madre del sí,
pide a tu Hijo por mí, para que me dé tu valentía.
Pide a tu Hijo por mí, para que me conceda
un corazón enamorado de él.
Pide a tu Hijo por mí, para que me dé
la gracia necesaria para entregarme y no fallarle nunca.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

El papa Benedicto XVI desembarca en la red social Twitter


Ciudad del Vaticano, 3 dic (EFE).- El papa Benedicto XVI lanzará su primer "tuit" el próximo 12 de diciembre, festividad de la Virgen de Guadalupe, patrona de América, a través de su cuenta @pontifex, con la que desembarca en la red social Twitter en ocho idiomas, entre ellos el español.
Los primeros "tuits" de Benedicto XVI se publicarán los miércoles, a mediodía, con motivo de las audiencias públicas que celebra en el Vaticano y con el paso del tiempo tendrán mayor frecuencia.
El papa responderá al principio a preguntas sobre la fe y con motivo de la apertura de la cuenta, las personas que lo deseen pueden enviarle preguntas en los ochos idiomas previstos a "#askpontifex".
El presidente del Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales, el arzobispo Claudio María Celli, que presentó el desembarco del papa Ratzinger en la red, dijo que la primera pregunta hecha fue en español.
"Querido papa, ¿cual es el centro de su mensaje?, ¿que idea querría que nos quedase claro?.", le preguntó un fiel, señaló Celli.
Más adelante, en cada "tuit" el papa subrayará una frase significativa de las audiencias de los miércoles.
El desembarco del obispo de Roma, de casi 86 años, en la red en la que se puede enviar textos de hasta un máximo de 140 caracteres, fue presentado, además de Celli, por el secretario de su dicasterio, Paul Tigh; el nuevo asesor de comunicación del Vaticano, Greg Burke; el portavoz, Federico Lombardi, y el director del diario "L'Osservatore Romano", Gian María Vian.
La presencia de los cinco evidencia la "importancia" que la Santa Sede da a las redes sociales para divulgar el Evangelio, precisó Burke.
Los "tuits" del papa serán publicados además de en español en inglés, portugués, italiano, alemán, polaco, árabe y francés.
El inglés la cuenta es @pontifex, mientras que en español será @pontifex_es, en portugués @pontifex_pt, en árabe @pontifex_ar; en italiano @pontifex_it; en francés @pontifex_fr; en alemán @pontifex_de y en polaco @pontifex_pl.

martes, 4 de diciembre de 2012

PONTE EN CAMINO

Al que prepara el camino al Mesías, Juan el Bautista, le toca barrer los caminos, quitar obstáculos, limpiar, arreglar la senda para que se pueda transitar sin dificultad. Copiémonos de Juan. Vayamos detrás de él con nuestra vela, intentemos prender luz de la llama de su profunda fe. ¡Pongámonos en camino, con ánimo, incansablemente! Merece la pena el esfuerzo. No podemos quedarnos parados. Con el Bautista aprendemos a nos ser protagonistas sino servidores, gente que señala dónde está Belén, dónde está el misterio del Dios que se encarna y se hace pobre para compartir nuestra vida. La esperanza del Adviento nos impulsa, es dinámica, no se puede quedar quieta. ¡Adelante!

lunes, 3 de diciembre de 2012

Nos encaminamos hacia Belén



No podemos vivir adormilados, ni ir por la vida con el pijama puesto y la mente embotada pensando en el dinero, o en los regalos o en cosas que, en el fondo, no nos hacen ser felices. Adviento es tiempo de despertarse con alegría. El reloj del Adviento es reloj que impulsa y despierta. Nos invita a velar, a permanecer despiertos, vivos, activos, comprometidos, con un rumbo claro y no equivocado. Nos encaminamos hacia Belén. Se ve la Estrella en el horizonte, la cueva…

Ahora toca dejarse prender por la vela de este primer domingo, que nos impulsa a no caminar en la oscuridad ni en el ensueño, sino en la senda de la búsqueda y del encuentro.

domingo, 2 de diciembre de 2012

EL EVANGELIO DE HOY


Evangelio: Lucas 21, 25-28. 34-36
"Se acerca vuestra liberación"

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Habrá signos en el sol y la luna y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, enloquecidas por el estruendo del mar y el oleaje. Los hombres quedarán sin aliento por el miedo y la ansiedad ante lo que se le viene encima al mundo, pues los astros se tambalearán. 
Entonces verán al Hijo del hombre venir en una nube, con gran poder y majestad. 
Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la cabeza: se acerca vuestra liberación. 
Tened cuidado: no se os embote la mente con el vicio, la bebida y los agobios de la vida, y se os eche encima de repente aquel día; porque caerá como un lazo sobre todos los habitantes de la tierra. 
Estad siempre despiertos, pidiendo fuerza para escapar de todo lo que está por venir y manteneros en pie ante el Hijo del hombre".