jueves, 30 de abril de 2015

EXCURSIÓN-CONVIVENCIA ENS A PORTUGAL (II)

Segundo día

Después de desayunar
Y pronto, aprovechando el día,
Vamos a ver monasterios,
Aunque han dicho que llovía.
El primero el de Batalha
Que sin torres ni espadaña,
Conmemora la victoria,
Contra  el ejército de España.

Yo pienso que aquí la guía
Fue un poco exagerada,
Los portugueses michos y buenos,
Los españoles no valían nada,
A pesar de triplicarlos,
En número, ahí es nada.

Sí debió ser importante
Y descomunal la derrota,
Los portugueses  se crecen
con la batalla de Aljubarrota.
El artífice de la hazaña
Fue el de la estatua, un tal Nuno,
Que después de derrotarnos
Se metió monje, el muy tuno.
Aquí  emprendió  Portugal
Su  camino, sola y hostil,
Hasta que con Felipe II
volvió un tiempo al redil.

Pero volvamos al monasterio
De Santa María, nombrada,
Por atribuirle el milagro
De la batalla ganada.
Lo construyo Juan I
El de la Casa de Avis
Que se caso con una inglesa
Que resultó,  un poco pilla,
 Y los  dos le dieron en los morros
A los nobles de Castilla.
 Tuvieron diez o doce hijos
Uno fue Enrique el Navegante,
Cuando los portugueses  se adentran
Por los mares adelante.
Regresan con naves cargadas
De especias, aves y frutos,
Que esculpían con premuras
Canteros en las columnas
Puertas, dinteles, adornos
Y en las grandes sepulturas.
Toda esa ingente riqueza
Tenían que administrar,
hicieron grandes palacios,
monasterios, y castillos
que había que decorar.

Dos grandes claustros de piedra,
Y de madera un tercero,
Que quemaron los franceses
Para calentarse en enero.
Aquí todo era inmenso,
Tanto que el Rey Don Manuel,
Toma como escudo, la tierra,
Diciendo que todo era de Él.

Su  Iglesia,  principal estancia
Del recinto conventual,
Se dice que es la más grande
De su estilo en Portugal.

Guerras, traiciones, desplantes,
Y muchas luchas fratricidas,
Para imponerse al contrario
Se confabulan con intrigas.
El sufrimiento del mundo
Sigue, igual que  antes era,
Simbolizado en  la figura
Del Cristo de la Trinchera.

ALCOBAÇA.-

Su origen fue la batalla
Aquí, la guerra también,
Agradeciendo la victoria
Sobre el moro, en Santarem.
La orden del Císter llega
Se implanta  con decisión,
Austeridad, sacrificios, silencio
trabajo y sobre todo oración.
  
Dios es el centro de todo
Nada me puede apartar,
Para esto viven los frailes
Comer poco, mucho rezar.
Tenemos un dato curioso
Pensado con mucho tino,
Aunque escasos de alimento
Nunca les faltó algo de vino.

Su labor de desarrollo
Vital para aquellas gentes,
Estudios, inventos nuevos
Y mucha ayuda a indigentes.
En el crucero de su Iglesia
Tendremos que destacar,
Las tumbas de Inés y de Pedro
Que allí se quiso enterrar.
A Pedro, llaman el Cruel,
Palabra muy elocuente,

Que puede darnos la idea
Como trataba a su gente.
Su esposa era Constanza
Pero se encaprichó de Ines,
 Se entendió con dos mujeres
Y hay quien piensa, que con tres.

Al morir Doña Constanza
Los nobles confabularon,
 Y en ausencia del amante
A Doña Inés asesinaron.
 Y fue tal la obsesión
De Don Pedro por su amada,
Que la sacó de la sepultura
 Y fue Reina coronada.
Están muy cerca los dos
En tumbas muy adornadas,
Para en cuanto resuciten
Que fueran  pronto encontradas.


De este gran Monasterio
Termino con estos versos,
Que tuvo doscientos frailes
Y ochocientos conversos.
Si debemos recordar
Que en Batalha y Alcobaça,
Faltan muchas obras de arte
Que Napoleón llevó a su casa.

Terminamos la mañana

Comiendo  en la Arcada,
El cocido portugués
Y bacalao a la nata
Cantidad muy abundante
Que no dimos acabada.

Una agradable sorpresa
De sobre mesa esperaba
Una   voz maravillosa
El Ave María nos cantaba,
En la iglesia de Valado de Frades
Con tanta potencia y fuerza
como fuera la tormenta,
 tromba de agua descargaba.









Por la tarde a Nazaré
Con su admirado Santuario,
Y la historia del caballero
Por un milagro salvado
De despeñarse en el mar
Siguiendo a un corzo escapado.

Esta virgen es  pequeña
Pero antigua y movida,
Vino de Jerusalén
Y llego hasta Aparecida.
Y para terminar el día
Breve visita a Obidos,
Pueblo dentro de un castillo
Que está muy bien protegido.




Este recinto medieval
De murallas rodeado,
Mercados de artesanías
Yerbas, licores y mate,
Pero lo que más destaca
Es el rico chocolate.
Placer para los sentidos
Gran satisfacción mirar,
Y si vas con la señora,

Es difícil no comprar.





Juan Carballés,
Responsable del Sector de León

Continuará...

miércoles, 29 de abril de 2015

EXCURSIÓN-CONVIVENCIA ENS A PORTUGAL

Primer día


Matrimonios de lo ENS
Visitan los Santuarios
En la excursión-convivencia
Que hacen todos los años.
Primera parada en Salamanca
Se nos unen los amigos
Que con ganas esperaban
De decirnos ¡Bien-venidos!
 Mª. Ángeles explica el programa
Con claridad y paciencia
Pedro  Pablo calla y lee,
Se encarga de la intendencia.

Reanudamos la marcha
Con ilusión y alegría,
De viajar hacia Fátima,
En tan grata compañía.


Primero, el rezo de laudes
Con Viti de Director,
Que como tiene buena voz
Sin micro se le oye mejor.
Parada y fonda en Tortosendo,
Convento del Verbo Divino,
Nos dieron buena comida
Y de beber, agua y vino.
Desafortunada caída
Y una muñeca fracturada,
De nuestra amiga brasileña
Y  por eso, nos dejaba.

El viaje sigue adelante
Por la Sierra de la Estrella,
Naturaleza  muy agreste

Pero exuberante y bella.

Por fin llegamos a Fátima
Y muy temprano a cenar,
Para ir al Santuario

Todos juntos a rezar.
Rosario de las antorchas,
Procesión por la explanada
Dándole culto al Señor,
también a la Madre
Al final de la jornada.


Juan Carballés,
Responsable del Sector de León
Continuará...

martes, 28 de abril de 2015

Carta de San Agustín

Queridos amigos:
Supongo que os sorprenderéis de esta carta después de tanto tiempo sin saber a penas quién soy y sin haberme decidido a hablar con vosotros antes.
Bueno me presentaré: soy Agustín, el de Hipona, ese que nació en Tagaste en el año 354 y que luego fue obispo y después santo,...pues ese soy yo.
Seguro que algo habréis oído hablar de mí, seguro que conocéis a alguno de los míos bien porque os dan clase, bien por la catequesis, el deporte, los grupos juveniles,...pero no sé si sabéis quién soy yo.
Os cuento (y perdonad el rollo), yo fui un chaval feliz, con amigos (siempre con amigos) que tenía un culo inquieto y me explico: no paraba un momento, estudié en Tagaste y Madaura ( en el Norte de África), estuve en Cartago, en Roma, en Milán,... fui pagano (como mi padre Patricio), luego miembro de una secta llamada de los maniqueos, luego caí en el escepticismo (agnóstico para aclararnos) hasta que por fin reposé mi corazón en Cristo y me bauticé cristiano.
Durante todo este tiempo tuve una novia, casi mi mujer con la que tuve un hijo, pero antes viví el ambiente de Cartago, que me fascinaba con sus noches de fiesta, sus teatros, su música, sus mujeres y su buen vino.
Fue una vida que creo que no es muy diferente de la que vosotros lleváis cuando salís el fin de semana. Una vida llena de juergas, borracheras, sexo y ruidos que aunque no me llenaban la vida, la hacían más llevadera.
Como os decía antes, siempre tuve ganas de buscar la Verdad y siempre partí de mis amigos...ellos me acompañaban en las juergas y en los estudios, ellos me apoyaban en mis depresiones y malos rollos y compartíamos juntos nuestras alegrías... (no sé qué hubiera sido de mi sin ellos!
Mi madre Mónica me daba mucho la "vara" con esto del cristianismo y yo pensaba que era cosa de mayores e ignorantes y ni siquiera me paraba a escuchar: (cómo una persona inteligente, con su vida programada y montada iba a creer o a comprometerse con esas tonterías!...pero un día pasó: entre el ruido y mis planes de futuro oí algo, no sé si fue una llamada o simplemente el hecho de pararme a pensar sobre mi vida, sobre lo que hacía.
Y bueno, llegó mi "conversión", descubrí otro camino, otra alternativa a la vida que llevaba hasta entonces. Aposté por ese camino, después de mucho pensar y os aseguro que me dio la felicidad.
Por esto os escribo, para contaros mi vida y para que sepáis que algunos de los míos irán a veros pronto y ellos os contarán cómo vinieron a mi, por qué son ahora de los míos, que dudas y problemas tienen, cómo es su vida, si son felices,...
No os quiero aburrir más, pero os pido un favor, cuando lleguen escuchadles, siempre merece la pena conocer algo distinto.
Un abrazo.
Agustín

lunes, 27 de abril de 2015

Nuestra Señora del Buen Consejo

Fiesta: 26 de abril
Milagrosamente se trasladó de Albania a Genazzano, Italia como respuesta a las plegarias.

Mucho antes de la venida de Cristo, el pequeño pueblo de Genazzano, a treinta millas de Roma, construyó un  templo a Venus, la diosa pagana del amor, a la que le tenían particular adhesión. Allí se le ofrecía culto y  celebraban grandes fiestas en su honor, especialmente el 25 de abril. Todos los años la gente de Genazzano gozaban de las festividades bailando y cantando.

En el siglo IV de nuestra era, cuando el cristianismo había sido públicamente reconocido en el Imperio Romano, el Papa San Marco (336d.C.) mandó construir una iglesia en una colina sobre el pueblo, no muy lejos de las ruinas del antiguo templo pagano. La iglesia, firme y fuerte pero pequeña y sencilla, fue dedicada a Nuestra Señora del Buen Consejo. A sabiendas del amor que la gente de Genazzano le tiene a las fiestas y celebraciones, el Papa declaró el 25 de abril (fecha de las antiguas fiestas paganas), como día de celebración cristiana en honor de Nuestra Señora del Buen Consejo.  La Iglesia respeta las costumbres de los pueblos pero siempre busca purificarlas de todo error y elevarlas hacia Dios.

A través de los siglos, Nuestra Señora fue honrada de manera especial en la pequeña iglesia de la colina, la cual se puso a cargo de los frailes de la Orden de San Agustín en 1356. Con el tiempo, el uso y los desgarros comenzaron a afectar el anciano templo. Para el siglo XV, la iglesia se había venido desvencijando tanto que algunos temían su total colapso. Pocos, sin embargo, parecían tener interés en repararla, posiblemente porque habían iglesias mas nuevas y mejores en el pueblo.

Una viuda santa, Petruccia de Geneo, que amaba a la Virgen devotamente, se sintió inspirada a reconstruir la iglesia. Deseaba que la iglesia fuera mas grande y mas bonita, mas apropiada para la Madre de Dios. Confiando en Nuestra Señora, Petruccia contrató trabajadores y constructores, compró también los materiales y vio las paredes subir. Sus vecinos la observaron por un tiempo en silencio, luego comenzaron a burlarse de ella, especialmente cuando les pedía ayuda.

Petruccia no podía comprender la actitud que sus vecinos y pensaba que su amor a Nuestra Señora los inspiraría a ofrecer ayuda. Pero los corazones no estaban para eso. Ellos sabían que construir una iglesia grande y bonita era un gran proyecto y que Petruccia tenía dinero, pero no lo suficiente. Percibían la obra como un acto de orgullo y presunción por parte de Petruccia y la criticaban. Cuando la obra tuvo que detenerse por falta de fondos, las paredes sin terminar fueron nombradas "la locura de Petruccia".

Probablemente Nuestro Señor permitió todo esto para fortalecer el amor y la confianza de Petruccia. La envidia, la falta de caridad, y los desacuerdos purifican y prueban toda obra de Dios.  Ella no dejó dominar por los obstáculos; estaba determinada a hacer todo lo que pudiese para ver la iglesia completada. Sentía que Nuestra Señora había inspirado el trabajo y que Ella lo apoyaría cuando fuese su tiempo. Decía que algún día "una gran Señora vendría a tomar posesión de ella". Petruccia entonces recurrió a sacrificios y oraciones más fervorosas.

Un poco después, durante la fiesta del pueblo, el 25 de abril, día de San Marcos de 1467, muchas personas estaban congregadas en la plaza del mercado pasando un buen rato-- festejando, bailando y cantando. No se sabe por que ya no rendían honor a Nuestra Señora del Buen Consejo en ese día, como lo habían hecho sus antepasados en siglos anteriores. Probablemente a través de los siglos su devoción por Nuestra Señora se había disminuido, pero habían conservado el amor por las fiestas.

En medio de las fiestas, alguien vio una nube encopada flotando bien bajo a través del claro cielo azul. El asombro paralizó el baile y el canto. Toda la atención fue puesta en la nube que bajaba despacio y que finalmente se detuvo en un borde angosto de las paredes sin terminar de la iglesia de Petruccia. La nube se abrió gradualmente, y en su centro apareció una bellísima pintura de Nuestra Señora con el Niño Jesús. Todas las campanas del pueblo comenzaron a sonar sin la ayuda de manos humanas.

Atraídos por el inesperado y fuerte repicar de las campanas, la gente de las villas aledañas se apresuraron a Genazzano para averiguar la causa. Mientras tanto, al escuchar del milagro, Petruccia, que estaba orando en casa, se apresuró a la iglesia para arrodillarse ante la pintura. Llena de alegría dijo que ella sabía que Nuestra Señora vendría a tomar posesión de su iglesia. Toda la gente se le unió en las alabanzas a Nuestra Señora.

Nadie conocía la procedencia de la pintura ni la había visto antes. Pronto una maravillosa lluvia de gracias y milagrosas curaciones comenzaron a suceder. En solo cuatro meses, 171 milagros fueron archivados. La gente comenzó a llamar a la imagen "Nuestra Señora del Paraíso" porque creían que había sido traída a Genazzano por manos de los ángeles ocultos en la nube encopada. Otros, por los numerosos milagros, la llamaban "Nuestra Señora de los Milagros".

Durante este tiempo, dos extranjeros procedentes de Scutari, Albania, llegaron a Genazzano buscando la milagrosa pintura de la Virgen.  Ellos contaron su testimonio. Scutari fue la última ciudad tomada por los Turcos en su invasión de Albania.   Cuando comprendieron que ya no podian resistir mas, le pidieron consejo a la Virgen sobre que hacer para mantener su fe católica en aquellas circunstancias.  Esa noche, ante el asombre de los dos albaneses la imagen de la Virgen se desprendió de la pared y elevándose por los cielos se comenzó a trasladar lentamente hacia el oeste.  Así pudieron seguirla, cruzar el mar adriático que separa Albania de Italia, hasta que llegaron a Genazzano. Así decidieron quedarse en Genazzano para vivir cerca de su Señora, que también se había refugiado.

Cuando el Santo Padre en Roma escuchó acerca de la pintura y de sus muchos milagros, mandó a dos obispos como comisionados a examinar y estudiar los acontecimientos extraordinarios. Después de una cuidadosa investigación, el Papa y los comisionados quedaron convencidos de que la pintura era verdaderamente Nuestra Señora del Buen Consejo, que había sido venerada por siglos en el pequeño pueblo de Scutari. El espacio vacío con las dimensiones exactas donde había estado la pintura en la iglesia fue evidente para todos. La imagen- del espesor de cáscara de huevo- había sido pintada sobre el yeso de la pared. Ninguna habilidad humana podría haber tomado con éxito la pintura de la pared sin romperla. Ninguna mano humana podría haberla traído a través del mar Adriático y colocarla en el borde angosto de la iglesia sin sujetarla.

Naturalmente, la iglesia de Petruccia fue completada. Más bien, hubieron tantas donaciones y fue ofrecida tanta ayuda que se convirtió en una bella basílica. La pintura fue puesta en un relicario maravilloso con un marco de oro adornado con piedras preciosas. Mas tarde dos coronas de oro enviadas por el Vaticano fueron colocadas en las cabezas de la Madre y el Niño. La pintura aún está en la iglesia, "la locura de Petruccia". Los monjes Agustinos son los guardianes especiales de la iglesia y de la pintura milagrosa.

La basílica ha sido afectada por los siglos. Sufrió particularmente por la Segunda Guerra Mundial ya que para arrestar el avance de los Aliados, los alemanes no dudaron en bombardear las iglesias. En Genazzano, el santuario de Nuestra Señora no se libró. Una bomba explotó en el con toda fuerza. El altar mayor fue completamente destruido, todas las pinturas y las estatuas en las paredes alrededor se vinieron abajo, pero la milagrosa pintura de Nuestra Señora del Buen Consejo, se mantuvo perfectamente intacta, tan bella como cuando Petruccia la vio por primera vez.

Nuestra Señora tiene los ojos parcialmente bajos como si estuviera escuchando con intensidad. Su vestido verde oscuro está adornado con un borde de oro. Su manto azul oscuro cubre su cabeza y sus hombros y cubre parcialmente al Niño Jesús, quien tiene una mano alrededor del cuello de su Madre. Su mejilla toca la de ella, y su mano izquierda esta sosteniendo el cuello de su vestido. El vestido rojo del Niño esta adornado con un borde de oro. La expresión en ambos, Madre e Hijo es de una profunda atención. El Niño Jesús parece que está listo para susurrarle algo a Su Madre. Es una pintura sencilla pero atractiva.

En los últimos cuatro siglos innumerables peregrinaciones y muchos milagros han ocurrido en el santuario de Nuestra Señora, Madre Amorosa que es para todos un tesoro de la gracia divina. Acude a ella con tus pequeños problemas; ve a ella con tus grandes problemas; confía en su guía. Ella es verdaderamente Nuestra Señora del Buen Consejo.

Las palabras "Madre del Buen Consejo" fueron insertadas por Pío IX a las letanías de la Virgen María.

Fuente: LeBlanc, Sr.M. Francis, O.Carm.,  Cause of Our Joy. Boston: Pauline Books and Media, 1976.

domingo, 26 de abril de 2015

EL EVANGELIO DE HOY

Acercarnos y conocernos


Cuando entre los primeros cristianos comenzaron los conflictos y disensiones entre grupos y líderes diferentes, alguien sintió la necesidad de recordar que, en la comunidad de Jesús, solo él es el Pastor bueno. No un pastor más, sino el auténtico, el verdadero, el modelo a seguir por todos.
Esta bella imagen de Jesús, Pastor bueno, es una llamada a la conversión, dirigida a quienes reivindican el título de «pastores» en la comunidad cristiana. El pastor que se parece a Jesús, solo piensa en sus ovejas, no «huye» ante los problemas, no las «abandona». Al contrario, está junto a ellas, las defiende, se desvive por ellas, «expone su vida» buscando su bien.
Al mismo tiempo, esta imagen es una llamada a la comunión fraterna entre todos. El Buen Pastor «conoce» a sus ovejas y las ovejas le «conocen» a él. Solo desde esta cercanía estrecha, desde este conocimiento mutuo y esta comunión de corazón, el Buen Pastor comparte su vida con las ovejas. Hacia esta comunión y mutuo conocimiento hemos de caminar también hoy en la Iglesia.
En estos momentos no fáciles para la fe, necesitamos como nunca aunar fuerzas, buscar juntos criterios evangélicos y líneas maestras de actuación para saber en qué dirección hemos de caminar de manera creativa hacia el futuro.
Sin embargo, no es esto lo que está sucediendo. Se hacen algunas llamadas convencionales a vivir en comunión, pero no estamos dando pasos para crear un clima de escucha mutua y diálogo. Al contrario, crecen las descalificaciones y disensiones entre obispos y teólogos; entre teólogos de diferentes tendencias; entre movimientos y comunidades de diverso signo; entre grupos y «blogs» de todo género...
Pero, tal vez, lo más triste es ver cómo sigue creciendo el distanciamiento entre la jerarquía y el pueblo cristiano. Se diría que viven dos mundos diferentes. En muchos lugares los «pastores» y las «ovejas» apenas se conocen. A muchos obispos no les resulta fácil sintonizar con las necesidades reales de los creyentes, para ofrecerles la orientación y el aliento que necesitan. A muchos fieles les resulta difícil sentir afecto e interés hacia unos pastores a los que ven alejados de sus problemas.
Solo creyentes, llenos del Espíritu del Buen Pastor, pueden ayudarnos a crear el clima de acercamiento, mutua escucha, respeto recíproco y diálogo humilde que tanto necesitamos.
José Antonio Pagola
4 Pascua - B
(Juan 10,11-18)
26 de abril 2015

sábado, 25 de abril de 2015

Instrumentos del Espíritu Santo.

No debes, relacionar el misterio del Reino de Dios y la Iglesia, que lo anuncia y lo realiza, con ninguna especie de artes mágicas y ocultas. “Misterio” significa que el origen y la meta de lo que somos y de lo que hacemos en la Iglesia es Dios.

El misterio te abre a la iniciativa de Dios: Él ha enviado a su Hijo, para hacernos a todos hijos suyos y hermanos los unos de los otros. Mediante el Espíritu Santo, Dios hace que pueda ser verdad esta filiación, esta fraternidad también, hoy, para nosotros. Por eso decimos que el Espíritu Santo es el primer evangelizador. Sin su trabajo interior en la vida de la gente, toda nuestra tarea evangelizadora sería inútil.

El Espíritu de Jesús es el que “mueve” y “convierte” los corazones para que crean. Cuando tú llegas a alguien, el Espíritu ya ha llegado antes. En toda nuestra tarea evangelizadora somos instrumentos del Espíritu Santo.

viernes, 24 de abril de 2015

Relaciones humanas

Muchas relaciones humanas son como los dedos entrelazados de dos manos. Nuestra soledad nos hace adherirnos unos a otros. Este mutuo aferramiento nos hace sufrir mucho, porque no nos quita la soledad. Cuanto más fuerte sea el intento, mayor será nuestra desesperación en el fracaso. Muchas de estas relaciones 'entrelazadas' terminan rompiéndose porque suelen convertirse en relaciones sofocantes y opresoras. Las relaciones humanas deberían ser como dos manos unidas en oración. Podemos apartarnos sin dejar de tocarnos con las puntas de los dedos. Pueden crear un espacio entre ellas, una pequeña carpa, un hogar, un lugar donde estar seguros. Las relaciones fieles entre las personas señalan hacia Dios. Son como oraciones en el mundo. A veces las manos que rezan están unidas, a veces el roce no es total, las separa una cierta distancia. Se mueven, separándose o acercándose, pero nunca pierden el contacto. Siguen rezando a Aquel  que nos ha reunido.

Henri Nouwen

jueves, 23 de abril de 2015

AVE MARÍA

En este primer día de excursión-convivencia y peregrinación a Fátima os dejamos este maravilloso Ave María.
Os recomendamos verlo en pantalla grande pues es impresionante


martes, 21 de abril de 2015

Dios entra en escena

En la temporada teatral de Madrid dos obras en cartel, La llamada y Enfrentados, muy distintas entre sí, con algunas similitudes, y es que en ambas Dios entra en escena, es más, llena teatros y en el patio de butacas encuentras a creyentes y no creyentes.
Distintas, una supone un chute de energía desde el minuto uno y otra impone un ritmo tranquilo y reflexivo; en la primera reina la música, mientras que en la segunda, la palabra toma la palabra. La llamada tiene como principales protagonistas a mujeres, aunque como siempre Dios termina siendo un hombre; en Enfrentados, la distancia generacional, diría que eclesial, es la protagonista. En la primera, un Dios actual hace su llamada particular a través de canciones de Whitney Houston, en la segunda, Dios ya hizo su llamada hace mucho tiempo, pero parece que a veces necesitamos volver a escucharla.
Comunes, las dos plantean preguntas a nuestra Iglesia de hoy y sacan a escena temas como la diversidad sexual y el humor, en Enfrentados incluso se atreven con temas como el sacerdocio de la mujer, el conformismo y la riqueza/pobreza. En ambas, la búsqueda de la identidad marcan el camino, Dios es alegría aunque a veces enfrascados en la doctrina y la comodidad le perdamos de vista. Ninguna resuelve con moralina, sólo sacan a la luz preguntas y diversión, y creo que por esa razón, y por la calidad teatral de las dos, llenan y llenan teatros sin que nadie salga ofendido.
Para cerrar sin cerrar, doy paso a Pagola. En su libro Grupos de Jesús encontré un buen resumen de lo que las dos obras supusieron para mí y un buen cierre para este post: «Jesús libera de agobios, no los introduce; hace crecer la libertad, no las servidumbres; atrae hacia el amor, no hacia las leyes; despierta la alegría, nunca la tristeza». Si vienen a Madrid, invitados al teatro están, y es que Dios ha entrado en escena.

Ana Vázquez Ponzone

lunes, 20 de abril de 2015

25 años de Pretty Woman...


Se cumplen 25 años de Pretty Woman. 25 años. Ahí es nada. Resulta que para muchos que la recordamos como el bombazo que fue, parece que se hubiera estrenado ayer, a pesar de que en realidad han pasado tantos años, y tantas reposiciones que ya hemos perdido la cuenta. Pero, al ver el dato, da un poco de vértigo. Porque 25 años ya es tiempo. Un cuarto de siglo. Unas bodas de plata. Muchos ni habíais nacido. Y, sin embargo, 25 años que se han ido. Volando.

En 1990, en España gobernaba Felipe González. Fraga se convertía en presidente de la Xunta. Nelson Mandela sería liberado ese año de su largo cautiverio político. Hubo mundial de fútbol, en Italia. Ganó Alemania, y de paso, los tres tenores dieron su primer gran concierto en las termas de Caracalla. En 1990 nacieron, entre otros, Jennifer Lawrence, Mario Balotelli, o Ricky Rubio. Fue el año en que Pérez Reverte publicó “La tabla de Flandes”. Antonio Gala ganó el premio Planeta con "El manuscrito carmesí". Y entre otras películas estrenadas ese mismo año, estaba “Bailando con Lobos”, “Uno de los nuestros”, “Solo en casa” o “Ghost”. Fue el año en que Mijaíl Gorbachov ganó el nóbel de la Paz y Octavio Paz el de Literatura. A Eurovisión aquel año fueron las Azúcar Moreno cantando aquello de “Tus ojos, bandido, robaron con cuentos…”

Y, ¿por qué contar todo  esto? ¿Es, sin más, un ejercicio de nostalgia? En realidad, se trata de pensar en el tiempo. En cómo es limitado, amplio y breve a la vez. En cómo es una riqueza de la que a menudo ni somos conscientes. Porque solo tenemos una vida, ni siquiera sabemos si larga o corta. Y tenemos el reto, y casi habría que decir la obligación, de vivirla con intensidad, de aprovecharla bien, de no dejar que se nos pase sin tomar muchas veces las riendas y las decisiones necesarias para elegir un rumbo que de verdad queramos seguir. Para hacer de nuestros días historias. De nuestros  pasos, caminos. Y de nuestras memorias, escuela para seguir avanzando, con otros, hacia un mañana (ojalá mejor).

José María R. Olaizola sj